Agarrando con fuerza su guitarra Gibson, Mafuyu Satou sale de su oscuro apartamento para comenzar otro día de su vida en el instituto. Mientras se echa una siesta en un lugar tranquilo de la escalera del gimnasio, tiene un encuentro fortuito con su compañero Ritsuka Uenoyama, que le reprocha que haya dejado que las cuerdas de su guitarra se oxiden y se rompan. Al notar los conocimientos de Uenoyama sobre el instrumento, Satou le ruega que lo arregle y le enseñe a tocar. Uenoyama acaba accediendo y le invita a participar en una jam session con sus dos compañeros de banda: el bajista Haruki Nakayama y el batería Akihiko Kaji.
La voz de Satou es sorprendentemente bella, lo que hace que Uenoyama esté decidido a convertir a Satou en el cantante principal de la banda. Aunque reticente al principio, Satou acepta la oferta tras un emotivo encuentro con un viejo amigo. Con el apoyo de sus nuevos amigos, Satou no sólo debe aprender a tocar la guitarra, sino también a aceptar las misteriosas circunstancias que le llevaron a ser su dueño.